PIEZA DEL MES

La Pieza del Mes: Paisaje

Apertura a partir del 24 de abril del 2021.

Ana Gómez es una artista visual originaria del norte del país, donde las distancias entre poblaciones son considerables y el tiempo parece no tener prisa. Tal vez esa sea la razón por la que Ana tiene una manera muy particular de observar las cosas; una predilección por una “mirada contemplativa” que definitivamente se percibe en la propuesta Paisaje.


La palabra paisaje describe una construcción mental, algo que se elabora a partir de lo que se ve al contemplar un territorio. Por lo tanto el paisaje existe porque hay un sujeto que se detuvo a contemplarlo, se encuentra en cada persona que lo mira y que lo interpreta con su propia cultura y su sensibilidad. Por eso puede decirse que hay tantos paisajes como personas que interpretan.


El paisaje además nunca es el mismo, es efímero, responde a una realidad momentánea, a una experiencia sensorial en cierto momento (tiempo). No es una realidad en sí, separada de la mirada de quien lo contempla, es
la medida subjetiva de un espacio geográfico. No es un lugar físico, sino una serie de ideas, sensaciones y sentimientos que elaboramos a partir de un lugar.


Gómez, nos presenta Paisaje, un agrupamiento polimorfo e inquieto de cuerpos que está destinado a disolverse, pero mientras eso sucede deviene en territorio por explorar y contemplar. Traspasa la categoría tradicional de
escultura, cuya naturaleza se prolonga más allá del objeto, y plantea la contradicción entre piezas diseñadas para producir objetos en serie y el gesto individual de resignificación. Nos muestra un conjunto de moldes*,
objetos propios de una sociedad pos industrial como la nuestra, analizados desde su unicidad y potencia estética, no desde su función. Paisaje da cuenta de un trabajo de proceso, de previa selección y análisis de cada molde y de cada elemento que lo conforma.

Finalmente, Ana nos guía en este territorio de recovecos, pendientes, elevaciones, pasillos, laberintos. Nos presenta una escena reconstruida de objetos no presentes sino insinuados y nos invita a atravesar el lugar, a recorrer el terreno —en el rol de recolector de experiencias— y a concebir nuestro propio paisaje como la expresión espacial de una temporalidad vivida.


GODEVA.
2021

  • Agrademos la generosa colaboración del taller La Martina, propiedad de Rocío Zárate, por darnos acceso a su
    colección y por prestarnos los moldes para que esta instalación pudiera realizarse.